Real Madrid Club de Fútbol: El bloque campeón y poco más

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El Real Madrid siempre es uno de los grandes animadores del mercado estival, pero todo lo que ha ocurrido (y todavía puede seguir ocurriendo) este verano ha sido de locos. Como en temporadas pasadas, Ramón Calderón se propuso un objetivo para apuntalar una plantilla con visos de ganar la Décima: el fichaje de Cristiano Ronaldo. Unas negociaciones que prácticamente comenzaron desde la final de la Champions League, que acabó conquistando el United de Ronaldo. Un tira y afloja en el que por momentos el portugués se acercaba y la ilusión de los aficionados blancos estaba por las nubes. Finalmente, el crack de Madeira, gracias a la presión de Ferguson, le dijo que, por ahora, no al Real Madrid…y no iba a ser el único.

Calderón se tuvo que mover rápido ante las demandas de Schuster y la ansiedad que podría generar la falta de fichajes en la afición. Así llegó el chollo del verano: Rafael van der Vaart. Un fichaje de calidad, ‘low cost’ y robándoselo a sus vecinos colchoneros. Pero la hinchada necesitaba ilusión y sólo había un nombre en la mesa: David Villa. Otro “no” para el club blanco, que además iba a ver truncada también otra petición del técnico alemán: Cazorla. Tres jugadores que rechazan al Real Madrid…para hacérselo mirar. A los ‘no fichados’ hay que sumarle otro quebradero de cabeza para el club blanco: la salida de Robinho. Era casi un secreto a voces que si fructificaba el fichaje de Ronaldo, llevaría consigo la venta del brasileño. Desechado el primer presupuesto, Robinho quiere hacer efectivo el segundo y volar hasta Londres con su padrino Scolari. Tanto es que el ‘10’ blanco no ha sido convocado para el primer partido de Liga… Su futuro es cuestión de horas.

No todo podían ser malas noticias para el club madridista. En el verde, que es donde de verdad se demuestra lo que vale un equipo, ya se ha hecho con el primer título de la temporada. Acaba de ganar la Supercopa, que se le resistió el año pasado, con toda la épica del mundo: remontando, con dos hombres menos y casi goleando al final. Un bloque que apenas ha sido completado con Van der Vaart, De la Red y Javi García, pero que se presenta como el principal favorito para revalidar el título de Liga.

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Sistema de juego

Segunda temporada de Bernardo Schuster en el banquillo madridista y otra vez el mismo objetivo: ganar la Liga. Saldó con un notable alto su primera campaña blanca con la consecución del título liguero, aunque deberá mejorar la posición y la imagen del equipo en la Champions League. Sin embargo, el temperamento del entrenador alemán no ha cambiado a pesar de los títulos y seguirá dándonos momentos memorables en las ruedas de prensa.

Schuster ha mantenido durante esta pretemporada, y en la primera competición oficial, el mismo sistema que dispuso la temporada pasada: el 4-3-3. Si hay un puesto más que seguro en el once madridista es el de la portería, la que ocupa el mejor guardameta del mundo y puede que dentro de poco Balón de Oro: Iker Casillas. Más problemas tiene el alemán en la configuración de la defensa ya que Cannavaro no está al cien por cien, al igual que Metzelder. Por ello, la pareja de centrales será la compuesta por el argentino Gabriel Heinze y el portugués Pepe, que espera que las lesiones le respeten más en esta nueva temporada. Sergio Ramos ya se ha acostumbrado definitivamente a actuar como lateral diestro, tanto en el Madrid como en la selección. La línea de cuatro la cierra el canterano Miguel Torres que ocupa el costado zurdo.

El encuentro de vuelta de la Supercopa sirvió para dejar claras un par de cosas: que Rubén de la Red puede ser una pieza importante en la rotación del equipo y que Van der Vaart es un jugador con carácter, en algunos casos excesivo. El holandés fue expulsado ante el Valencia y no será de la partida en Riazor. De este modo, Guti estará acompañado en la medular por De la Red, que ayudará en las labores de contención a Diarra. El maliense es una pieza fija en el esquema de Schuster, mientras que su acompañante se alternará en la figura de Gago o el de Móstoles.

Arriba lo que todos conocen ya casi de carrerilla. La pareja de atacantes formada por el sempiterno Raúl González Blanco y el killer holandés Ruud Van Nistelrooy, que ha comenzado la temporada como un tiro, a pesar de su expulsión en la Supercopa. Pero el que más halagos ha recibido en los últimos encuentros ha sido Robben, que completa la tripleta de ataque escorado a la derecha, a banda contraria.

Jugador clave

Robben: Una de las promesas electorales del presidente Calderón que tardó en llegar un año. 36 millones y muchas dudas, aunque más lesiones, que le llegaron a apodar El hombre de cristal. Se perdió gran parte de la temporada pasada, pero acabó recuperándose y su final de Liga fue más que brillante, tanto que ensombreció al ahora díscolo Robinho.

Parece que no le ha venido nada mal que eliminaran a Holanda antes de lo esperado en la Eurocopa ya que ha permitido al extremo holandés ponerse a punto en esta pretemporada. Ha comenzado como un tiro y ha sido el motor del ataque madridista en los últimos encuentros. Sin duda fue el máximo artífice de la victoria del Madrid en la Supercopa. Llega en plena forma y es la máxima amenaza del club blanco para acabar con la maldición de Riazor.

Atención a…

Van Nistelrooy: Cuantos más veranos pasan por las piernas de Van Nistelrooy, más facilidad encuentra para marcar goles. Los dos golazos en Mestalla y la conexión con su compatriota Robben fueron decisivos para la consecución del primer título madridista. Su absurda autoexpulsión en la vuelta no debe empañar sus grandes números: dos partidos oficiales, tres goles. Nos es mala media. Y ahora un nuevo objetivo: entrar en la historia del club como el jugador que anotó el gol 5.000.

Casillas: Ni en verano dejó de hacer milagros el bueno de San Iker, para el bien de nuestra selección. Su actuación en cuartos de final ante los italianos fue fundamental para acabar con el gafe de los cuartos y promete seguir haciendo de las suyas en esta nueva temporada. La rumorología le sitúa como uno de los más firmes candidatos al Balón de Oro, pero para que lo gane deberá seguir haciendo milagros.

Higuaín: Probablemente no sea de la partida este domingo en Riazor, pero el Pipita seguro que tendrá minutos en la segunda mitad y podrá seguir intentando convencer al cuerpo técnico de que él es el delantero suplente que tanto ansía el míster. Su gran actuación en el trofeo Santiago Bernabéu ha hecho que su nombre vuelva a estar en el candelero. Velocidad, desparpajo y movilidad son sus principales armas.