Ahora tiene que hablar Raúl

El cielo del Real Madrid se llenó de nubes negras en la tarde de ayer cuando se conoció que Ruud Van Nistelrooy dice adiós a la temporada. La baja del goleador del equipo, unida a la fragilidad de Robben, el jugador más desbordante de la plantilla, hace que salten todas las alarmas en la casa blanca. Éstas se han agravado más aún el pasado martes cuando el Madrid fue eliminado de la Copa del Rey por un Segunda B, el Real Unión de Irún. Todo ha creado un ambiente de rumores y críticas que tiene al entrenador alemán, Bernd Schuster, en el punto de mira, tanto que puede ser destituido si pierde este sábado en Zorrilla.


Si Schuster se come el turrón en Madrid dependerá en parte de los pocos jugadores que le quedan sanos en el partido. Unos jugadores que parece que no están del todo convencidos de su entrenador, como al alemán no le convence la plantilla que tiene. Y un nombre por encima de los demás: Raúl González Blanco. Otra vez en el disparadero por un doble motivo: primero, se rumorea que Schuster no está conforme con la actitud del '7'; pero de Raúl (e Higuaín) dependerá todo el poder ofensivo del equipo blanco. El capitán ha tenido, hasta ahora, un papel secundario en el equipo madridista, pero las ausencias de Robben y VanGol cambian su rol en el equipo. Será titular en todos los partidos, actuando en punta con el Pipita y ya no valdrá poner excusas a su rendimiento. El Madrid le necesita y él tiene que dar la cara.

Y es que esa parece que sea la única solución viable para el problemón que se le presenta al Madrid. El mercado invernal nunca lleva consigo soluciones ni jugadores del nivel que necesita el Real Madrid, aunque Valdanito Crespo sí puede ser un buen parche. Sin embargo, toca tirar con lo que hay. Ahora se verá si le queda fútbol a Raúl como piensan algunos o si se tiene que ir echando a un lado como piensan otros...